conservacion de leche materna

conservación y almacenamiento de la leche materna

La leche materna extraída debe almacenarse siempre que sea posible en envases de cristal que por ser menos porosos ofrecen la mejor protección.

Tiempo de almacenamiento

La leche materna tiene propiedades antibacterianas que permiten su almacenamiento por períodos prolongados de tiempo, en determinadas condiciones.

Refrigerada (en nevera) entre 0 y 4 ºC: 8 días.
Congelada:

Tipos de envase.

La leche materna extraída debe almacenarse siempre que sea posible en envases de cristal que por ser menos porosos ofrecen la mejor protección. La segunda opción serían los envases de plástico duro transparente (policarbonato) y en tercer lugar los de plástico duro traslúcido (polipropileno). Otra opción son las bolsas de plástico especialmente comercializadas para almacenar leche materna. No hay evidencia clara sobre los beneficios de uno u otro tipo de envase para almacenar leche fresca, de modo que la madre puede utilizar el que le resulte más adecuado a sus necesidades.

No se debe mezclar en el mismo recipiente leches extraídas a horas diferentes.

Limpieza de los envases

Es conveniente limpiarlos con agua caliente y jabón y secar bien antes de usar.

Como descongelar y calentar la leche extraída:

La leche se puede descongelar bajo el chorro de agua fría primero y gradualmente ir aumentando el calor del agua del grifo hasta que esté caliente. También se puede tibiar al baño María. Se debe agitar antes de probar la temperatura.

Para usar la leche descongelada se debe dejar descongelar por completo. Una vez esté a temperatura ambiente se podrá tibiar durante unos minutos al baño María. La leche descongelada se puede guardar en nevera 24 horas pero no volver a congelar.

Olor rancio

Algunas madres pueden notar que su leche tiene un olor rancio al descongelarla. Esto se debe a la acción de la lipasa. Para prevenirlo, se puede escaldar la leche (calentar hasta observar que se empieza a formar espumita por los bordes del recipiente) y luego dejar enfriar y congelar. Una vez que tiene olor rancio no se puede hacer nada para eliminarlo. No hay evidencia de que esta leche ranciada sea perjudicial para el bebé, pero la mayoría la rechazan.